¿Qué es un proyecto de cambio de uso?
Un Proyecto de cambio de uso consiste en cambiar el uso al que se destina parte de un edificio (normalmente un local), con el fin de convertirlo en un local apto para ser habitable, y de la misma manera que figure a nivel catastral como una vivienda y pueda ser valorado como tal.
Cada día es más habitual que se realicen este tipo de proyectos, el principal motivo es el precio de la vivienda, que está a unos niveles nunca vistos y esta opción es más económica que adquirir una vivienda con la cédula tramitada.
¿Por qué necesitas un proyecto de cambio de uso?
Un proyecto de cambio de uso se caracteriza porque se debe dar el mismo cumplimiento como si fuera una vivienda de obra nueva, por lo que debe seguir las normas marcadas por el Código Técnico de la Edificación (CTE) como las normas de habitabilidad (Las cuales varían para cada comunidad autónoma), todo ello se debe seguir porque una vez finalizadas las obras esta nueva vivienda obtendrá la correspondiente Cédula de habitabilidad.
Con el fin de poder disponer de tu local a vivienda y así poder disfrutar de todas las ventajas de vivir en una vivienda, necesitarás tramitar este tipo de proyecto.
¿Cómo se realiza un proyecto de cambio de uso?
Paso 1: Estudio de viabilidad
El primer punto a tratar es verificar que es posible implantar el Proyecto de cambio de uso de vivienda en el local seleccionado, para ello se harán diferentes comprobaciones, tanto a nivel urbanístico como a nivel de habitabilidad, estas comprobaciones varían en función de la zona, pero por norma general tendrán que ver con la densidad de viviendas máxima del edificio, la superficie del local y los metros de fachada entre otros.
Este estudio de viabilidad nos dará la seguridad de que este proyecto de cambio de uso se puede realizar, y que al finalizarlo podremos tener en nuestro poder la cédula de habitabilidad, y en consecuencia, registrar este inmueble como vivienda.
Es importante tener la viabilidad del proyecto de cambio de uso bien realizada, ya que el incumplimiento de uno de los puntos tanto a nivel urbanístico como a nivel de habitabilidad hará que no os otorguen la correspondiente licencia de cambio de uso.
Paso 2: Redacción del proyecto
Una vez pasada con éxito la viabilidad del proyecto de cambio de uso, procederemos a redactar el proyecto de cambio de uso, el cual está clasificado como un proyecto de obras mayores, se clasifica de esta manera no por las obras en si, sino por el cambio de uso.
Este proyecto de cambio de uso, además de contemplar las obras que se van a realizar en el interior del local, justifica toda la norma urbanística de la zona para que se pueda implantar la vivienda, por lo que deberá justificar puntos como:
- Dependencias mínimas: Toda vivienda deberá estar formada por varias dependencias
- Salón-Comedor-Cocina: Se puede proyectar como un solo espacio, pero debe estar en una zona diferenciada.
- Dormitorio principal: Debe disponer de espacio suficiente para ubicar una cama de matrimonio y un armario.
- Baño: Pieza compuesta por inodoro, lavabo, ducha o bañera.
- Superficies mínimas de cada estancia:
- Recibidor o zona de entrada: Debe estar adecuada para acceso a minusválidos, por lo que se tiene que poder inscribir un círculo de 1,5m de diámetro.
- Pasillos: Es el encargado de distribuir la vivienda al resto de estancias, se requiere una anchura superior a 0,90cm.
- Salón: Se requiere que tenga una superficie mínima de 12m² y se debe poder inscribir un círculo mínimo de 3 metros de diámetro.
- Comedor: Se requiere que tenga una superficie mínima de 10m² y se debe poder inscribir un círculo mínimo de 2,5 metros de diámetro.
- Salón-Comedor: Los espacios anteriores se pueden agrupar en uno solo, en este caso la superficie mínima es de 15m² e inscribir un círculo mínimo de 2,5 metros de diámetro.
- Cocina: Esta estancia debe disponer de todos los elementos necesarios para la preparación y conservación de comidas y limpieza, por lo que tendrá fregadero, encimera, horno, extractor de humos, etc.
- Alturas mínimas de las estancias: No deberá ser inferior a 2,5 metros.
- Justificación de las ventilaciones de cada zona, las cuales se realizaran a través de ventanas al exterior.
- Justificación de iluminación natural, obligatorio en dormitorios.
- Resistencia estructural
- Etc…
Todos estos puntos mencionados anteriormente deben estar justificados en el proyecto de cambio de uso, además se deben justificar también los parámetros urbanísticos para no tener problemas en el momento de tramitar la licencia.
Paso 3: Tramitación y obtención de licencias
Una vez realizado el proyecto, se tramitará la licencia correspondiente, a partir de la cual podremos realizar las obras de adecuación por parte de una empresa constructora. Obtener la licencia, significa que el cambio de uso está aprobado por parte del ayuntamiento, por lo que el siguiente paso será realizar las obras.
Estas obras suelen ser sencillas, ya que en la mayoría de casos no se realizan modificaciones estructurales, pero es importante contar con la supervisión de un técnico para que se ejecuten siguiendo las especificaciones de proyecto.