En este articulo veremos cómo obtener una licencia de bar con todos sus requisitos técnicos, legales y todas las fases que comporta montar este tipo de negocio. En Projectum te lo mostramos todo.
Con el auge de los programas televisivos sobre cocina y restauración, el sector está en pleno crecimiento, encontrando una gran oferta allá donde vayas, desde bares de toda la vida, hasta bares más actuales con una cultura vegana. Te explicamos lo más relevante y los requisitos mínimos exigidos para obtener tu Licencia de Bar.
Lo importante es conocer al detalle todos pasos que vas a tener que dar para poder tener tu licencia de bar, pues cada ayuntamiento es un mundo y en función de la ciudad donde te encuentres la normativa puede cambiar por completo, es por ello que desde Projectum, con nuestra amplia experiencia en el sector, vamos definir los pasos a seguir para evitarte problemas que dificulten la apertura de tu bar.
No entraremos a valorar ubicaciones, pero es evidente que uno de los puntos clave para el rápido éxito de un bar/restaurant es donde decidimos implantarlo, teniendo en cuenta el cliente objetivo y la oferta gastronómica que tendremos alrededor.
¿Cuáles son los requisitos para obtener una licencia de bar?
REQUISITOS TÉCNICOS
No todos los locales son aptos para la implantación de este tipo de actividades, éstos deben cumplir una serie de requisitos técnicos que harán que un local se pueda convertir en bar/restaurant o no. Uno de los mas importantes, será definir si queremos tener cocina en el local, pues en caso de querer cocina, la clave estará en poder instalar una campana extractora con su conducto de extracción, es importante asegurarte de tener la conformidad de la comunidad de propietarios, pues ellos son los que decidirán si te dejan o no.
Por ejemplo, los requisitos para abrir un bar pueden variar ligeramente debido a las ordenanzas municipales locales. Es crucial consultar con el Ayuntamiento de Barcelona para entender las regulaciones especificas que podrían afectar la planificación y el diseño de tu bar. Por ejemplo, la normativa sobre zonas de alta concurrencia y restricciones en ciertas áreas del centro puede impactar la ubicación y características del establecimiento.
Por último, deberemos hacer un estudio de superficies y evacuaciones. En el primer caso, deberás tener en cuenta que un local de restauración debe disponer de los siguientes espacios: cámara de residuos, 2 baños y uno de ellos adaptado (en algunos casos muy específicos se podrá instalar un solo baño), zona de cocina y manipulación de alimentos, zona de almacén y zona de venta o degustación. Las superficies necesarias para cada zona, dependerá del ayuntamiento donde vayas a montar tu actividad.
Asimismo, deberás tener en cuenta la altura libre del local, por norma general, esta sebe ser igual o superior a 2,50 metros en zonas de pública concurrencia y 2,10 metros en zonas como almacén, baños y residuos.
Requisitos legales para abrir un bar
Otro punto a tener en cuenta y que también es fundamental, es consultar a la administradora de fincas o al presidente de la comunidad y si los estatutos de la misma te permiten realizar actividad de bar/restaurant en su bloque, cada día es más habitual encontrarse con comunidades que vetan la implantación de esta actividad en su comunidad, haciendo imposible abrir estos tipos de negocio en su bloque.
Una vez realizadas estas comprobaciones, es importante que el local cumpla las condiciones urbanísticas necesarias para poderse abrir, es decir, deberemos realizar una consulta con el ayuntamiento o con alguna oficina técnica para que tramite un Certificado de Compatibilidad Urbanística. Pues en estos últimos años, con el auge de la restauración, los ayuntamientos han ido creando planes urbanísticos especiales que regulan la implantación de este tipo de actividad en función de parámetros como la densidad o incluso el ancho de calle.
El local cumple con los requisitos legales
¡EMPEZAMOS A PROYECTAR!
Cuando hemos confirmado con claridad los puntos anteriores llega el momento de contactar con una oficina técnica, es importante que esta tenga experiencia en este tipo de proyectos para evitar errores de diseño que nos perjudiquen el día de mañana.
El primer paso a realizar es la licencia de obras, por norma general, el local se deberá adecuar a las especificaciones que requiera el cliente, y para ello se deberá realizar un proyecto donde se refleje tanto el estado actual y todos los aspectos a construir:
- Memorias descriptivas y constructivas.
- Proyectos de instalaciones.
- Pliegos de condiciones.
- Proyectos de instalaciones
- Planos y secciones.
- Presupuesto de ejecución material.
Cuando el proyecto está acabado ya tendremos el material a punto para tramitar la licencia de obras, la cual se deberá solicitar al ayuntamiento y esperar a su respuesta (el tiempo de respuesta de cada ayuntamiento es diferente, pero por norma general, se estima un mes).
Con la licencia de obras en proceso, es el momento de buscar una constructora que pueda ejecutar las obras, lo cual será sencillo en caso de tener proyecto, ya que todos los trabajos quedarán definidos en este documento y podrás comparar diferentes constructoras con un criterio muy firme.
La concesión de la licencia de obras marcará el inicio de las obras, por lo que llegado a este punto deberás tener a la empresa constructora contratada para que inicie los trabajos lo antes posible.
¡Ya ha pasado un mes y aún no hemos empezado la obra! Sí, lo sabemos, pero pensad que empezar una obra sin proyecto puede traer consecuencias muy graves, tanto a nivel legal como a nivel económico.
DURANTE LA OBRA
A medida que se vaya ejecutando la obra, es el momento para que la oficina técnica empiece a preparar el proyecto de actividades (también conocido como proyecto de apertura o licencia ambiental), de esta manera el proyecto estará acabado al mismo tiempo que la obra.
Este proyecto, estudiará el impacto que ocasiona la implantación de esta actividad sobre la población y sobre su entorno, mostrando todas las medidas correctivas necesarias para que este impacto esté dentro de la normativa urbanística. Estas medidas correctoras contemplan emisiones de ruido, generación de residuos o aislamiento acústico de la actividad.