Cada vez son más las familias que se plantean realizar una instalación solar fotovoltaica en sus casas, habida cuenta del coste de la electricidad y el gas en los últimos tiempos, que está disparado. Además, al tratarse de una energía totalmente limpia, también fomenta el consumo de energías renovables y comporta un considerable ahorro energético en el recibo mensual de la luz.
Como todos los proyectos de cierto calado, necesitaremos que un ingeniero vise toda la documentación y asegure que la instalación se adecua a lo demandado y cumple con toda la normativa vigente, que podemos hallar en el Real Decreto-Ley 15/2018, el Real Decreto 244/2019 y el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios (RITE) de 2013.
En este sentido, es conveniente consultar la Guía Profesional de Autotramitación del Autoconsumo que pone a disposición de todos el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE).
¿Qué implica instalar placas solares?
Son varios los factores que intervienen en la definición de cada proyecto: el tamaño del sistema que se va a instalar, si se verterán o no los excedentes de la producción a la red eléctrica y si será un sistema individual o compartido. En todos los casos hay que contar con las tres administraciones (local, autonómica y estatal), así como con las compañías eléctricas. En resumen, si la instalación se queda por debajo de los 10 kW, son varios los trámites que nos ahorraremos.
¿Qué tramites necesitamos antes de realizar la instalación?
Son varios los pasos previos a la instalación de un sistema de energía solar fotovoltaica en casa. En primer lugar, un técnico competente debe elaborar una memoria técnica que se ajuste a la normativa, teniendo en cuenta el ordenamiento urbanístico que haya en la población en cuestión, la protección medioambiental vigente y si la instalación se ubica en alguna zona de interés histórico que haya que preservar.
Una vez ejecutado el proyecto, un instalador autorizado realizará la instalación y emitirá un certificado de Instalación.
En segundo lugar, tras la ejecución del proyecto, hay que solicitar los permisos para la conexión a la red de la empresa distribuidora, salvo si son instalaciones menores y van a consumir todo lo generado, sin verter los excedentes a la red. La empresa distribuidora debe dar respuesta, positiva o negativa, en un breve plazo de tiempo a nuestra petición.
A continuación, viene varios trámites más: una licencia de obras que dependerá de la normativa de cada ayuntamiento, por lo que puede servir una mera comunicación, o bien este puede demandar unos estudios adicionales para evaluar el impacto de la instalación; la liquidación de varios impuestos afectos a estos trámites, como el Impuesto de Construcciones y Obras (que suele estar bonificado en gran parte) y el IBI (también normalmente bonificado).
Una autorización medioambiental de ámbito autonómico, en función de la potencia que se va a instalar; una autorización administrativa previa, también autonómica y, en algunos casos, estatal… En definitiva, varios trámites que pueden echar atrás al usuario medio, que acaba por confiar en una empresa especializada en estas tareas, como Projectum.
¿Qué necesitamos una vez acabada la instalación fotovoltaica?
Acabada la instalación, llega el momento de pedir los permisos, como los certificados de la instalación y fin de obra que debemos presentar ante las autoridades de nuestra Comunidad Autónoma.
Luego llegará la inspección inicial y varias de tipo periódico, algo que varía en función de la Comunidad Autónoma en que vivimos, pero que suelen ser cada cinco años. También es posible que se nos demande una autorización de explotación, un permiso autonómico facultativo en función de la potencia de nuestra instalación y de si antes ha habido un proyecto técnico que debe haberse visado.
Por último, hay una inscripción en los registros de autoconsumo que suele ser de oficio entre las instalaciones domésticas, además de una inscripción en el Registro Administrativo de Instalaciones Productoras de Energía Eléctrica (RAIPRE), en función de si generamos excedentes o no.
Ya “solo” quedará la parte contractual con la eléctrica elegida: un contrato de acceso y conexión al sistema; un contrato para servicios auxiliares, una comunicación de compensación de excedentes y un contrato de representación. En suma, toda una odisea.
¿Qué solución ofrecemos en Projectum?
La tramitación de una instalación de energía solar fotovoltaica puede ser todo un engorro para el usuario. Por suerte, desde Projectum nos encargamos de todos los trámites para que pueda disfrutar en su hogar de energía limpia sin tener que batallar contra todas las gestiones burocráticas.
Calcula tu presupuesto para una instalación fotovoltaica
Ahora que ya sabes todo sobre como instalar placas solares en casa, desde Projectum te ofrecemos una calculadora online totalmente gratuita donde podrás ver que coste puede tener tu instalación fotovoltaica en casa.